Reseña: Historias de amor en campos de guerra - Vanessa De La Torre
El conflicto armado en Colombia ha dejado 262.197 muertos según informa el Observatorio de Memoria y Conflicto del Centro Nacional de Memoria Histórica en datos recopilados entre 1958 y 2018. Durante el gobierno del expresidente Juan Manuel
Santos, Premio Nobel de Paz en 2016, se adelantaron y echaron a andar los
acuerdos de paz con las FARC, el grupo guerrillero más antiguo del mundo y el
segundo causante de la mayor cantidad de víctimas del conflicto en Colombia.
La desatención de
las necesidades básicas, el abandono del estado a varias regiones del país, la
disputa por la tenencia de las tierras, la lucha de clases sociales, la desigualdad
y la inequidad en el acceso a oportunidades, entre otras, son algunas de las causas que la Comisión Histórica del Conflicto y sus Víctimas dan como originarias de este flagelo que sumergió a Colombia en un bucle de violencia y subdesarrollo del cual apenas comienza a salir.
Esta lamentable
realidad ha marcado para siempre nuestra historia, pero hay personajes que estuvieron
en las áreas más afectadas y para quienes las consecuencias de esto han sido
directas. Es acerca de algunos de estos personajes sobre los que Vanessa De La
Torre, una de las periodistas más importantes del país, ha querido escribir en
su libro Historias de amor en campos de guerra.
La autora trata de dar una respuesta a la siguiente pregunta y de
sustentarla mediante las seis crónicas o relatos que construyen esta obra: ¿es el amor más fuerte que la guerra?
Conversaciones
que son traídas al papel en las que los protagonistas recuerdan lo que los
llevó a irse al monte y tomar las armas, a luchar por ideales que consideraban
válidos y que muchas veces se perdían en el camino, a dejar todo lo que les
pertenecía y partir a nuevos rumbos, pero especialmente cómo el amor logró
cambiarlo todo para ellos.
El libro comienza
con la historia de Myriam, el amor de la vida de Carlos Pizarro Leongómez, el
máximo líder del ya extinto grupo guerrillero M19. Luego nos lleva a los
recuerdos de Fabiola, quien durante 30 años lloró a su difunto esposo Libardo (víctima
en la toma del Palacio de Justicia) en la tumba equivocada. También conocemos a
Alejandra y Ramiro, dos exguerrilleros que decidieron ingresar al programa de
reinserción del Gobierno Nacional (esta fue mi crónica favorita). Incluso nos presenta todo lo que tuvo que
vivir la cantante de música popular Arelys Henao y el peso del conflicto armado
en su carrera. Conocemos a Sandra, quien desde muy pequeña fue víctima de la
violencia y no vio más camino que cargar sobre sus hombros un fusil más grande
que ella misma. Y cerramos con una historia de esas que parecen sacadas de los
cuentos de hadas.
Lo que expone
Vanessa en su libro tiene como eje central el amor, pero logra pintarnos un
panorama de lo que representó y representa el conflicto armado para el país,
las heridas incurables y las cicatrices que siguen sanando. La periodista deja
que las palabras de sus entrevistados destaquen, sin tomar posición ni buscar
ejercer juicio alguno sobre las decisiones que llevaron a unos y a otros a
tomar el lugar que tomaron. La autora funge como moderadora en una conversación
entre el lector y los personajes que han decidido contar su historia para ayudar
a forjar memoria histórica, atributo principal de esta obra.
Seis de las siete
voces que tenemos la oportunidad de conocer les pertenecen a mujeres. La visión
del conflicto que concede este hecho nos permite enfrentarnos a delitos que las
estadísticas omiten, a abusos que el tiempo ha mantenido ocultos y aterradoras
narraciones que han quedado reservadas para la mente de quienes las padecieron.
Niñas que fueron violadas en los campos de batalla, abortos obligatorios que se
convirtieron en la cotidianidad de las combatientes, delitos sexuales que vulneraron
la integridad de miles de mujeres a lo largo del país. Y esta es solo una de
las miradas que nos permiten estas crónicas.
El entendimiento
del amor que tenemos al pasar de las páginas va más allá de lo romántico y transita
otros terrenos, otras aristas que facilitan el acercarnos y entender el poder
de este sentimiento. El amor de una madre por sus hijos, el amor por nuestros
sueños, el amor por nuestros amigos, el amor por la libertad, el amor por
nuestros ideales. El amor como tuerca que permite hacer posible lo imposible.
¿Por qué seguimos
adelante los colombianos? Esa es una de las preguntas que Jorge Franco, uno de
los escritores colombianos más importantes en la actualidad y quien ha abordado
las consecuencias de la violencia en el país dentro de sus novelas, se hace en
el maravilloso prólogo que sirve como antesala a las crónicas del libro. La
respuesta a esta inquietud la encontrarán en el conjunto de relatos que construyen
Historias de amor en campos de guerra, un documento que muestra
el poder de las segundas oportunidades, la necesidad de hablar de perdón y
reconciliación, y la importancia de encontrar un motor que nos lleve a seguir
adelante.
Comentarios
Publicar un comentario