Bienvenidos a mi mundo, bienvenidos a mi biblioteca...
Hace poco menos de dos años (febrero del 2016) hice una entrada para mostrarles lo que era en ese momento mi biblioteca y contarles algunas de las historias que allí se escondían. Ya han pasado poco menos de dos años y muchas cosas han cambiado en mi vida, dentro de ellas mi biblioteca.
Mi sobrina y yo limpiando los libros y acomodando todo en la nueva biblioteca. Estuvimos un par de días en este proceso. |
La estantería que ven a continuación fue la primera que compré, hace ya más de 10 años, cuando trabajaba como caddie de golf y pude adquirirla con los primeros pagos que recibí. Es de un tono más claro que las que tengo ahora, y ya no está conmigo, sino con mi hermana. Ahora ella es la encargada de cuidarla y de guardar sus historias ahí.
Actualmente mi biblioteca está compuesta por cinco estanterías y un mueble algo grande cuya función principal es servir para soportar el TV, pero todos los espacios son aptos para los libros.
Estas imágenes corresponden al mueble del que les hablo, en el cual se hospedan en su mayoría los libros que no he leído, y algunos que ya leí en digital pero quise tener en físico y por tanto siguen en su empaque. Por ahí se encontrarán también a Opi y a Kipi, quienes hacen parte importante de mi vida en el mundo editorial, al robot alegórico a la campaña de mercadeo que hicimos en Ediciones B Colombia (Q.E.P.D.) para Estados Unidos de Japón de Peter Tieryas, y al perezoso Wawawiwa.
Estas son las primeras tres estanterías, en donde solo uno de los espacio (el inferior del primer mueble) no cuenta con un guardián, lo que se debe a que ahí se acomodan los libros más grandes (en tamaño) de toda mi biblioteca, los cuales son en su mayoría infantiles o novelas gráficas.
Bueno, los guardianes son figuras de acción, muñecos o como ustedes los llamen, los cuales tienen un significado importante para mí por una u otra razón, o simplemente me gustan y por eso tienen un lugar dentro de mi biblioteca. En ocasiones las cosas no tienen una explicación tan profunda y no hay problema con ello.
En la estantería #1 también hay libros de Ediciones B (los cuales tienen un significado muy especial), así como algunos en edición de bolsillo y cositas bonitas de Angosta Editores. De este mueble destaco muchos de los libros de mi colección de El principito, la edición conmemorativa de "100 años de soledad", mi hijo "Mariposas verdes", los libros que he conseguido de Philip K. Dick y una novela antiquísima que conseguí el la librería El Gliptodón de Buenos Aires (si van a esta ciudad, no pueden dejar de visitarla).
En la estantería #2 está la colección Narrativa Contemporánea de Panamericana Editorial, algunos de los libros que llevan conmigo desde la época del colegio, las sagas "Zodíaco" e "Insignia" a las cuales les guardo muchísimo cariño, y muchos de los libros de V&R que tengo en mi biblioteca (amor puro para "Dos chicos besándose" de David Levithan). Especial mención a "El club del misterio", lo primero que leí por gusto y elección propia; recuerdo que fue un regalo que me hizo mi padre un día de enero que fuimos al centro de Bogotá, y pasamos por una librería y me dijo que escogiera el que quisiera, y el obsequio costó tan solo $2.000 (menos de un dólar americano) por allá en el año 2000. Por aquí pueden ver también una edición de lujo de "100 años de soledad", la cual rescaté entre las cosas que mi hermano había decidido tirar a la basura... Hay gente así jajaja.
En la estantería #3 se albergan tres distopías a las que les tengo mucho cariño, de las cuales evidentemente mi favorita es "Amanecer rojo" del siempre guapo Pierce Brown (la cual tengo autografiada luego de que una amiga viajó con ellos por horas solo para ayudarme con esta misión), "La luz que no puedes ver" de Anthony Doerr que es uno de mis libros favoritos de la vida, así como mi colección de Alfaguara y Literatura Random House.
En la estantería #4 no hay un orden o clasificación en específico más allá de la altura de los libros, pero sí que hay varios de ellos que me gustaría mencionar. Por ejemplo, la saga de "Las crónicas de Narnia", "The power" de Naomi Alderman (uno de los libros favoritos de Barack Obama y que ojalá puedan leer), mi edición autografiada por Paula Hawkins de "La chica del tren", "The extraordinary journey of Vivienne Marshall" de mi querida Shannon Kirk que me lo envió desde el otro lado del continente, y un recuerdo muy grato de una amiga muy especial: "El archivo de las atrocidades" de Charles Stross. Aquí la historia viene con el funko de Annabelle, pues tuve que recorrer cielo y tierra para encontrarlo, y terminé por hallarlo en el primer lugar en el que busqué... Soy muy bueno buscando cosas jajaja.
En la última estantería están los libros más pequeños, unos cuantos que en su momento consideré vender, unos que no he vendido, y otros que llegaron hace poco a mi biblioteca. Como ven, ahí está Snowball llorando porque hay espacios libres y eso a él no le gusta en lo absoluto... y a mí tampoco.
Estas últimas tres imágenes corresponden a la parte superior de mis estanterías. Allí viven libros de colección, los guardianes de mayor tamaño, y una caja en la que están todos los separadores que tengo.
Y por supuesto hacen falta algunos libros que tengo en mi cuarto porque estoy leyendo actualmente o están pendientes por reseñar, y algunos otros que he prestado y no han encontrado el camino de regreso a casa (si les prestan un libro, por favor devuelvanlo).
Bueno, así se ve mi biblioteca actualmente, un espacio que me llena de tranquilidad, paz y mucha felicidad. A mí me gusta mucho y me siento orgulloso de ella.
Y claro, no podía terminar esta entrada sin dejarles algunas imágenes de mi biblioteca hace un poco menos de dos años, momento en que esta entrada nació. El orden ha cambiado, hay muchos libros que se fueron, muchos otros que han llegado, misma situación con los guardianes, pero su esencia sigue siendo la misma: uno de mis lugares favoritos en el mundo.
Si han llegado hasta aquí y me han acompañado durante este recorrido, no me queda más sino darles las gracias por hacer parte de esta aventura llamada "Liberando Letras", la cual ha contribuido a que ahora sonría más, a qué mi día a día se pinte de nuevos y mejores colores, a conocer a personas maravillosas, a vivir miles de aventuras, a ver muchas nuevas oportunidades, a conocer cientos de lugares, a ponerme en los zapatos de decenas de personajes, y a descubrir que en ese conjunto de hojas a los que muchos ni sentido le ven, se esconde una forma de vida a la cual todos nosotros hemos decidido entrar.
Que bien me ha sentado leer esto. Espontaneidad y frescura en la exposición de su actitud hacia la lectura totalmente positiva. El libro también resulta ser un buen amigo en nuestro vivir.
ResponderBorrarMuchas gracias por tu comentario Julio :)
BorrarPara mí hay varias formas de conocer a una persona y visitar su estantería es una de ellas... Así que... ¡Mucho gusto Esteban!
ResponderBorrarGRACIAS TOTALES :)
BorrarMe ha gustado mucho tu biblioteca y todas las figuras que tienes. Todo se ve muy ordenado, además hemos podido conocer un poco más de ti a través de tus libros y las historias que nos cuentas
ResponderBorrarSaludos!
Hola Ana :)
BorrarPues muchas gracias por tomarte el tiempo de conocer a mis guardianes, a mis libros y mis historias. Bienvenida a mi mundo.
Gracias por pasarte por aquí.
¡Amo tu biblioteca y el libro de Su Majestad, lo quiero con todo mi corazón! Me encanta que seas tan dedicado con ella, que tengas todo claro y por supuesto que los leas. Una biblioteca más allá de ser un lugar para alojar libros, es una extensión visible de nuestra mente, porque por medio de ella conocemos al lector y más que nada a nosotros mismos.
ResponderBorrarTodos los libros que están ahí es por algo, sino ya se hubieran ido, tal como lo cuento en esta entrada. Tu biblioteca es como un brazo o una pierna, tal como tu dices. Yo también amo tu biblioteca, y creo que Su majestad podría ser bien disfrutado por Amelié.
BorrarFuerte abrazo :)
me he enamorado de tu estantería por completó. excelente coleccion de libros 😍😍😍
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