Reseña: La luz que no puedes ver - Anthony Doerr

CLIC AQUÍ PARA UNA RESEÑA DE LA SERIE


"Éste es mi secreto. Es muy sencillo: sólo se ve bien con el corazón. Lo esencial es invisible para los ojos".

Seguro reconocen esta cita de El principito, pero hoy no quiero hablarles de ese libro, sino de una novela que conecta bien con esa verdad dicha por el zorro. Les hablo de La luz que no puedes ver de Anthony Doerr, premio Pulitzer de ficción 2015 y cuyo génesis fue una imagen que llegó a la mente del autor en la que una niña contaba historias a través de la radio y un niño atrapado en otra parte las escuchaba.

Esta obra se desarrolla en la Europa de la Segunda Guerra Mundial, aquel desafortunado momento de la historia que refleja el instinto autodestructivo de nuestra especie. Marie-Laure es una niña que a temprana edad quedó ciega y que vive con su padre en París. Cuando cumple doce años, los nazis ocupan la ciudad y ella debe mudarse a Saint-Malo. Por otro lado está Werner, un huérfano muy talentoso que vive con su hermana en un refugio en Alemania. Las habilidades del chico no pasan desapercibidas por las Juventudes Hitlerianas, quienes lo reclutan de inmediato.

"Las piedras no son más que piedras, la lluvia no es más que lluvia y la desgracia es solo mala suerte. Sucede que algunas cosas son más extraordinarias que otras y por eso son necesarios tantos cerrojos".

Estamos ante una novela llena de citas inolvidables, lecciones eternas y situaciones que navegan entre la desolación y la esperanza. Cada cosa en ella está puesta con un objetivo, como una especie de tuerca sin la que nada podría funcionar. Cada suceso en la vida de Marie-Laure y Werner se acomoda como la pieza de un rompecabezas. Este obra es una gota de agua en medio del desierto, así como el título que lleva. 

Anthony Doerr recibiendo el Premio Pulitzer

La riqueza de esta obra está principalmente en sus descripciones, en el modo en que nos permite conocer un territorio lleno de caos en el que habitan la belleza, la resistencia y la fraternidad. Te sientes parte de la acción desde el primer momento y allí es donde todo cobra sentido pues, más haya de leer la historia, consigues habitarla. 

"¿Cómo iba a saber que el cariño también podía matar?".

En este libro los personajes priman por sobre la trama, misma que se construye por sus vivencias y pensamientos.  Marie-Laure, la protagonista, desborda ternura e ilusión, además de un sentido de osadía envidiable; Werner es inteligente, arriesgado y muy particular, factores determinantes en una situación como la que presenta la obra; y es imposible no hablar de uno de mis personajes favoritos de la vida: Daniel LeBlanc, el padre de Marie-Laure, un tipo de esos que tanto requiere nuestra humanidad, un avezado en el oficio de ser bueno y que tiene a la bondad como bandera de batalla. 

«La luz que no puedes ver» es una historia inesperada y maravillosa que nos recuerda que no es necesario tenerlo todo para ser felices y que descubrir el mundo y nuestro lugar en él requiere de aprender a sentirlo más allá de lo evidente. Este es un hermoso homenaje al amor y la valentía.
Pdta. El capítulo "Vuelta al mundo" es una expresión del poder y la necesidad de la literatura en nuestras vidas. Léanlo, disfrútenlo y vívanlo.

"Abre los ojos y observa todo lo que puedas antes de cerrarlos para siempre".




Comentarios

Lo más leído

Reseña: Tres promesas - Lesslie Polinesia

Análisis: El mensajero de Agartha de Mario Mendoza

Reseña: La teoría de Kim (Tomo 1) - Jay Sandoval

Reseña: Boulevard (Boulevard #1) - Flor M. Salvador

Reseña: Almendra - Won-Pyung Sohn